Megalópolis CDMX. Nuestra ciudad verde
Pocas cosas merecen tantos cuidados y se respetan tanto en nuestra ciudad como las plantas. Este gusto por lo vegetal tiene hondas raíces en el México prehispánico, donde muchos árboles y plantas eran considerados sagrados. De la parte española tenemos el gusto por los jardines que heredaron a su vez de los árabes del norte de África. A lo anterior habría que sumar el agudo conocimiento que los aztecas tenían de las plantas y su uso como adorno en bailes y fiestas, práctica que luego copiaron los misioneros y sacerdotes en la colonia. Lo cierto es que la gran mayoría de los mexicanos se hacen cargo de muchas más plantas que mascotas, y buscan la manera de encontrar espacios verdes en su entorno inmediato. Ésta es una de las tradiciones que embellecen más nuestra ciudad y al parecer perdurará muchos años más.